10 de agosto de 2015

The Strokes - Comedown Machine (crítica)



Saludos, lectores (si es que alguno ha logrado desengancharse de la música disco de por vida). Hoy nos toca hablar sobre la HECATOMBE. En efecto, me refiero al último álbum de The Strokes. El trabajo se titula Comedown Machine y fue lanzado allá por el año 2013. Amigos, he aquí el final de una carrera. Una carrera musical que dio comienzo de la mano de una insuperable mezcla de riffs rockeros y que ha acabado abrazada a una repelente aglomeración de melodías ochenteras propias de algún antro discotequero de mala muerte. Pongámonos en antecedentes.

Angles había salido a la venta en 2011 y había logrado una recepción francamente buena por parte del público. Parecía que The Strokes habían vuelto a la vida, pero no. Los neoyorquinos se decidieron a reanudar las grabaciones en 2012 bajo el mando y liderazgo de Julian. Comedown Machine fue moldeado por Casablancas hasta el punto de recordar más a su carrera en solitario que al resto de la discografía de The Strokes. El resultado de este trabajo fallido refleja una relación no demasiado sana entre el cantante y las discotecas de barrio.

El estilo principal y característico de este disco es el indie pop con influencias disco y derivados. También podemos encontrar algo de rock y tal, pero bueno, poca cosa, no os preocupéis. En fin.

Vamos allá con la crítica.


3 de agosto de 2015

X Ambassadors - VHS (crítica)



Saludos, lectores (si es que alguno se ha dignado a acudir a la cita de las maravillas). El disco de esta semana se titula VHS y pertenece a una banda estadounidense llamada X Ambassadors. Se trata de un grupo de pop rock bastante nuevecito que ha colaborado con artistas como Jamie N Commons o Imagine Dragons. Hoy vamos a analizar su debut en profundidad. Vamos allá.

X Ambassadors nació en 2009 en la ciudad de Nueva York. Lo cierto es que no hay mucha información referente a los inicios de la banda. Tan solo se puede constatar alguna que otra gira de la mano de la cantante Lights y el posterior lanzamiento de un EP debut, titulado Ambassadors EP, que vio la luz en el año 2010. En 2013, los neoyorquinos volvieron a la carga con el lanzamiento de un nuevo EP, Love Songs Drug Songs EP, que tuvo una acogida bastante generosa por parte del público. El último EP fue publicado en 2014, llevando por título The Reason EP. Aquel último lanzamiento desembocó en la composición de nuevo material para 2015. Este fue el nacimiento de VHS.

Lo cierto es que el género característico de X Ambassadors es bastante parecido al de Imagine Dragons. Una especie de folk pop con influencias guitarrísticas y algún que otro arreglo experimental. Muy poco concreto todo. Lo veremos más adelante. En lo referente a la instrumentación, destacan las guitarras acústicas y la batería electrónica.

¡Ah! Por cierto... Este trabajo está formado por nada más y nada menos que veinte pistas, de las cuales siete son interludios. En la crítica, yo me centraré en los trece cortes DE VERDAD, es decir, en las canciones propiamente dichas. Si tenéis interés en el resto, echadles un vistazo. Tampoco es que sean nada del otro mundo. Grabaciones de los miembros de la banda y situaciones cotidianas bastante prescindibles. 

Ha llegado el momento de la verdad. Démosle caña.

27 de julio de 2015

The Strokes - Angles (crítica)



Saludos, lectores (si es que alguno ha logrado sobrevivir a unas vacaciones sin peripecias). Hoy toca darle calor (es gracioso porque es verano) al poco afortunado Angles de The Strokes. Este disco fue lanzado allá por el año 2011 y tuvo una recepción bastante cañera por parte de la crítica. Muchos acusaban a este álbum de romper el esquema inicial de la banda y de echar por la borda todos los buenos años de blablabla. Sin embargo, yo considero que este trabajo abre una nueva etapa en la historia de The Strokes. Una etapa bastante más mediocre y sinsentido que la anterior, pero una nueva etapa, al fin y al cabo. La intención es lo que cuenta.

Nos situamos en el año 2006. La banda comenzó a tener serios problemas tras el lanzamiento de First Impressions Of Earth y la relación entre los componentes del grupo fue tensándose cada vez más y más. Es por ello por lo que decidieron cortar por lo sano y separarse. A partir de entonces, los neoyorquinos comenzaron a grabar en solitario. La sorpresa llegó en 2009, cuando Casablancas logró convencer a sus viejos colegas para que se rejuntaran. Aquel fue el nacimiento del disco que hoy nos ocupa.

El álbum, fíjate que curioso, fue grabado en la casa del guitarrista rítmico de la banda, Albert Hammond Jr. Cabe decir que Casablancas trató de distanciarse bastante del resto del grupo para que estos se viesen obligados a tomar la iniciativa (qué estratega).

Y llega el momento del género. Este disco se caracteriza por la abundancia de sintetizadores y arreglos electrónicos (¡NOOOO!). Se podría decir que nos encontramos frente a una extraña deformación indie pop bastante poco afortunada. Aún así, os diré algo: este disco no es tan malo como parece. De hecho, tiene un par de cortes que merecen alabanzas.

Sin más dilación, que comience el espectáculo.


4 de julio de 2015

Imagine Dragons - Smoke + Mirrors (crítica)



Saludos, lectores (si es que alguno todavía finge algún tipo de interés por este blog). La crítica de hoy gira en torno al segundo trabajo de Imagine Dragons, que fue lanzado a principios de 2015. En efecto, hablo del famosísimo Smoke + Mirrors. La verdad es que este álbum me impactó bastante en su día. Yo antes pensaba que Imagine Dragons era una banda comercial de pop dulce y facilón. Pero, cuando escuché este disco, me di cuenta de que la cosa no iba de ese palo. ¿El qué? ¡No, no! No me malinterpretéis. Imagine Dragons siguen siendo tan comerciales y poperos como siempre. Lo que pasa es que estos muchachos por fin han encontrado el verdadero sentido del rock and roll. ¿Veis por dónde van los tiros? Bien.

Nos situamos hace un par de añitos. Night Visions lo estaba petando cosa mala. No había ni un solo anuncio en el que no apareciese On The Top Of The World. Todo el mundo tarareaba Demons como loco sin tener ni la más mínima idea de lo que decía la letra. Radioactive era tocada en directo cerca de siete veces por minuto en cada municipio. El prado estaba sembrado, claro que sí. La semilla de Imagine Dragons estaba dando su fruto. Pero la cosa iba a cambiar. Estos muchachos no se iban a conformar con aparecer en todas las radios del mundo. Ellos querían más. Querían más rock and roll y menos chunda chunda (sigue habiendo chunda chunda). Querían guitarras de verdad, y no esas extrañas trompetas experimentales que nos pretendían colar en Night Visions. Estos muchachos querían cambio. Por desgracia, la cosa se ha quedado a medio camino.

En lo referente al género, tenemos una deliciosa ensalada vegetariana de pop rock de entrante, un poderoso y artificial hard rock de segundo y una especie de sustancia folk acústica sumamente inquietante de postre. La cosa es así. Siguen siendo Imagine Dragons.

Vamos allá con la crítica, sí señor.


26 de junio de 2015

The Strokes - First Impressions Of Earth (crítica)



Saludos, lectores (si es que alguno puede permitirse dedicar una semana y media para leer una de mis críticas). Damas y caballeros, hoy toca darle bombo y plato al tercer álbum de The Strokes. ¡Qué sorpresa! Pues nada, a ello vamos. El disco se titula First Impressions Of Earth y fue publicado allá por el año 2006. Lo cierto es que este trabajo es bastante TOCHO y mucho más denso de lo normal. Es aquí donde The Strokes deciden crear una importante ruptura con el pasado y empezar a experimentar. Ya hablaremos de ello más adelante.

Corría el año 2005. Los niños correteaban alegres por las calles y los neoyorquinos estaban preparados para volver al estudio dispuestos a crear nuevo material. Nuestro querido Gordon Raphael (encargado del lanzamiento de Is This It y de Room On Fire) decidió abandonar la aventura permitiendo que David Kahne se situase al frente de la producción del álbum. La discografía dejó de presionar a la banda para que acelerase los lanzamientos y optó por dejar a los muchachos tiempo indefinido para trabajar. El disco fue realizado en un periodo de unos diez meses, lo que favoreció que las grabaciones fuesen mucho menos intensas y aceleradas de lo que habían sido en Room On Fire. Todo fluyó con mucha más calma y tranquilidad de lo normal.

Lo cierto es que First Impressions Of Earth es un disco complejo y muy pero que muy pesado en el que la experimentación empieza a vislumbrarse. De los treinta minutos de duración de Is This It o de Room On Fire pasamos a más de cincuenta. La sencillez de las melodías brillantes desaparece. Los riffs constantes y los solos de guitarra se ven sustituidos por letras muy elaboradas y por arreglos vocales. Los temas cortos y pegadizos dan lugar a canciones bastante largas y algo más planas de lo normal. El sonido sucio y callejero desemboca en un sonido claro y artificial. Y a pesar de todos los cambios, First Impressions Of Earth sigue siendo, a día de hoy, un trabajo francamente disfrutable y muy recomendable. Vamos a ver los aspectos positivos y negativos de este álbum tan interesante.

Sin más dilación, demos comienzo a la crítica. Intentaré abreviar lo más que pueda, pero ya sabéis que yo soy mucho de triqui y aún más de traca. Venga, a leer la crítica completa todo el mundo.


23 de junio de 2015

Imagine Dragons - Night Visions (crítica)



Saludos, lectores (si es que alguno no se ha puesto a darle de palos a la pantalla del ordenador con la culata de una recortada). Hoy toca darle calor a... ¡Eh! ¿A dónde vais? ¡Esperad! ¡No, no, no! ¡Volved! Mierda... ¿Y qué hago yo ahora? ¡Ah! ¿Que aún queda gente leyendo la crítica? ¡Pues estupendo! Ya pensaba yo que todos se habían largado nada más leer el título. Y no es para menos, supongo, porque en esta entrada voy a hablar sobre Imagine Dragons, una de los grupos más amados y odiados de la historia de la música. ¿El qué? ¡No, no! No se me han cruzado los cables ni nada de eso. Simplemente pienso que, al tratarse de una banda que está en boca de todos, no debería ponerme en contra de la humanidad. De modo que hoy vamos a hablar sobre el primero de sus discos, Night Visions, que fue publicado en septiembre de 2012.

La verdad es que este grupo nunca me ha llamado absolutamente nada, pero este año me entró el gusanillo. Se podría decir que me intrigué. Sí, amigos, me intrigué. Me intrigué por su nuevo álbum, Smoke + Mirrors (del cual hablaré), que anunciaba un estilo bastante rockero y muy llamativo para el respetable. Y es innegable que estos señores han hecho cosas sencillamente atroces, pero también algunas cosas de provecho. Y algunas de ellas están incluidas en el disco que hoy nos ocupa. Bueno, que me pierdo. Ha llegado el momento de las presentaciones.

Imagine Dragons nació en el año 2008 en la ciudad de Utah. El cantante Dan Reynolds conoció al batería Andrew Tolman en una universidad privada de Provo. Ambos trataron de convencer a varios colegas para que les ayudasen a formar una banda. La cosa fue creciendo poco a poco. En 2009, los estadounidenses se trasladaron a Las Vegas, donde empezaron a trabajar en un par de EPs que saldrían a la luz el año siguiente. Imagine Dragons también dieron un par de conciertos por Nevada e incluso llegaron a llevarse premios en algún que otro festival de la zona. Las grabaciones del debut no dieron comienzo hasta finales de 2011.

Este disco está constituido por un amplísimo abanico de géneros musicales, entre los que destacan el pop rock, el folk, la electrónica (¡A cubierto!), el indie rock y un larguísimo etcétera. ¿Demasiadas pretensiones? Puede. Lo veremos más adelante.

Sin más dilación, servidor inaugura las barricadas. ¡A divertirse todo el mundo, hombre ya! Bueno... ¡Uf! Creo que necesito una buena ducha...


20 de junio de 2015

The Strokes - Room On Fire (crítica)



Saludos, lectores (si es que alguno ha logrado escapar con vida de aquella escaramuza que resultó ser la crítica de Drones). La entrada de hoy gira en torno al fabulosísimo Room On Fire de The Strokes, que fue lanzado a mediados del año 2003. Este espléndido disco mantiene el nivel inaugurado en Is This It y refuerza la posición de los neoyorquinos en el mercado rockero. Se trata de un álbum muy completo y entretenido que cuenta con algunos momentos sencillamente irrepetibles. Opino que Room On Fire no tiene nada que envidiar a su predecesor. Personalmente, si tuviese que escoger uno de los dos primeros trabajos de The Strokes, me quedaría con este. ¿El qué? ¡Ah! Claro. Toca situarse.

El pelotazo estaba dado. Ahora solo había que asentar un poco el trasero y esperar a que todo fluyese según lo previsto. Los neoyorquinos no se andaron con milongas y decidieron volver al estudio nada más terminar la gira de Is This It. Las grabaciones empezaron a cargo de un tal Nigel Godrich, que fue puesto de patitas en la calle tras un par de semanas de trabajo. La solución llegó de la mano de Gordon Raphael (encargado del lanzamiento de Is This It), que acudió en el momento justo dispuesto a rescatar a los muchachos. Cabe decir que hubo presiones importantes por parte de la discográfica, lo que provocó una notable aceleración en el proceso de grabación. The Strokes acabaron bastante insatisfechos con el resultado final del disco, dada la rapidez y la tensión con las que había sido realizado.

El género caracteístico de Room On Fire se asemeja bastante al de Is This It. El sonido es algo más nítido y las letras, más variadas. Además, noto alguna que otra influencia punk o incluso funky en determinadas pistas. Por lo demás, la temática viene a ser la misma.

Sin más dilación, damas y caballeros, que empiece el espectáculo. DISCAZO, sí señor.